La diferencia entre frustración y conflicto radica en qué tipo de sentimiento se despiertan en la mente de una persona. La psicología organizacional estudia el vínculo entre la frustración y el conflicto dentro de las personas y entre los individuos. Estos dos conceptos no deben verse como intercambiables, sino como dos estados diferentes que se influyen en gran medida entre sí. La frustración puede definirse como un sentimiento de insatisfacción que se deriva de la incapacidad de un individuo para lograr un objetivo. Por otro lado, un conflicto puede definirse como una condición en la que el individuo enfrenta dificultad para llegar a una decisión debido a dos o más intereses diferentes. Simplemente un conflicto es un desacuerdo. Cuando una persona está teniendo un desacuerdo consigo mismo, se conoce como un conflicto emocional. A través de este artículo, examinemos las diferencias entre los dos conceptos.
La frustración puede entenderse como un sentimiento de insatisfacción que proviene de la incapacidad de un individuo para lograr un objetivo. Por ejemplo, imagina que trabajas duro para aprobar un examen. Aunque haya trabajado lo más duro posible, termina fallando en el examen. En tal caso, te sientes frustrado. Esto puede verse como una respuesta emocional normal, como cualquier otra emoción que sientas ante la derrota. El individuo experimenta emociones mixtas como ira, dolor e impotencia. Si el logro del objetivo fuera extremadamente vital para el individuo, esto daría como resultado un mayor grado de frustración. Esto resalta claramente un vínculo entre la frustración y la importancia del objetivo para el individuo. Si la importancia del logro fuera mayor, entonces sería la frustración. Si la importancia fuera menor, entonces la frustración experimentada por el individuo sería menor.
Según los psicólogos, la frustración puede ser causada por dos tipos de factores. Son factores internos y factores externos
Factores internos de frustración son aquellos que provienen dentro del individuo, como debilidades individuales, problemas de confianza, dilemas personales, etc. Prestemos atención a un ejemplo. En un entorno de trabajo, un empleado trabaja en una propuesta de proyecto con la intención de obtener la aprobación de la junta directiva para implementar el proyecto. A pesar de que trabaja duro, en la presentación, no funciona bien debido a su miedo escénico y falta de confianza. El empleado se siente frustrado. Este es un ejemplo de cómo se puede causar la frustración debido a factores internos.
Factores externos de frustración Consulte los que están fuera del individuo, como condiciones de trabajo, compañeros de trabajo, plazos, etc. Tomemos el mismo ejemplo. Imagínese, en este caso, el empleado trabajó en un equipo. La propuesta fue rechazada por los superiores debido a la falta de compromiso de los otros miembros del grupo. En este caso, son los factores externos los que conducen a la frustración.
Sin embargo, en psicología organizacional, se cree que un pequeño grado de frustración puede funcionar como motivador. Sin embargo, hay situaciones en las que la frustración puede conducir a la negatividad, como en el caso de la agresión hacia los compañeros de trabajo.
Un conflicto puede definirse como Una condición en la que el individuo enfrenta dificultad para llegar a una decisión debido a dos o más intereses diferentes. Por ejemplo, imagine a un estudiante que tiene dudas sobre su futuro. No sabe si ingresar a la universidad y seguir su educación superior o comenzar a trabajar, ya que tiene dificultades financieras. Tal situación crea un conflicto dentro del individuo. Esto también se puede ver como un estado emocional donde una persona está en un dilema.
Los psicólogos creen que tal El conflicto emocional puede conducir a la frustración. Este es el vínculo entre frustración y un conflicto. Un conflicto puede asociarse con molestias físicas como insomnio, dolores de cabeza o incapacidad para comer. Las personas usan mecanismos de defensa cuando se enfrentan a tales conflictos emocionales. Proyección, el desplazamiento son algunos de los mecanismos de defensa ampliamente utilizados.
Sin embargo, También pueden surgir conflictos entre dos o más personas. Por ejemplo, si a un individuo no se les da los recursos para lograr un objetivo por otro, conduciría a un conflicto. En este sentido, la frustración puede conducir a un estado de conflicto.
• La frustración puede definirse como un sentimiento de insatisfacción que se deriva de la incapacidad de un individuo para lograr un objetivo.
• Un conflicto puede definirse como una condición en la que el individuo enfrenta dificultades para llegar a una decisión debido a dos o más intereses diferentes.
• La frustración es un sentimiento de insatisfacción.
• Un conflicto es un desacuerdo.
• La frustración puede generar conflictos cuando la causa de la frustración es externa.
• Conflictos internos, o de lo contrario, los conflictos emocionales que tienen lugar dentro del individuo pueden conducir a la frustración.
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